Red Velvet cupcakes, decorados

  No creo en las coincidencias, ni en las casualidades, creo que todo está relacionado de alguna manera... creo en la energía (si es positiva mejor) y en que todos estamos conectados. Y pienso que debe haber mucho AMOR dando vueltas en éste mundo pues el Red Velvet está circulando por muchos blogs y a mí (que soy romántica por naturaleza) ese bizcocho me da esa sensación de amor a primera vista. 

 Les cuento cómo decidí hacer éstos exquisitos red velvet: hace un par de semanas comentábamos con una amiga lo rico que se veían éstos pasteles. Yo ya tenía ganas de hacer alguno y una mañana abro mi escritorio del blog, y veo que Bea ha publicado ese bizcocho rojo de chocolate tan deseado! Y ahí ya más ganas tenía... aunque tuve que posponerlo unos días, pues andaba una en otros proyectos culinarios. 

  Pues bien: un detalle era que la receta original llevaba aceite y a mí en particular me gusta la mantequilla (manías mías digo yo). Igualmente iba a probar con aceite, pero upsss!!! mi botella de aceite de oliva tenía tan sólo un "culín" que me llega para la ensalada de esa noche... ayyy qué cabeza la mía. Suerte que había mantequilla (otro ingrediente que no puede faltar en mi cocina) y ahí me puse a ajustar un poco la receta, porque además yo quería cupcakes! Así que les dejo la receta modificada:


Ingredientes: (para 20 cupcakes)
- 100 gr. de mantequilla
- 220 ml. de buttermilk (lo compré en el super)
- 2 huevos (tamaño L)
- 2 cucharadas colorante líquido rojo
- 1 cdita. de vinagre blanco
- 1 cdita. de extracto de vainilla
- 1 pizca de sal
- 1 cdita. de bicarbonato
- 40 gr. de cacao en polvo
- 250 gr. de harina
- 250 gr. de azúcar
- 1 cdita. de polvo para hornear


Preparación:
Pre-calentamos el horno a 170 ºC. Batimos la mantequilla con el azúcar, y luego agregamos los huevos, el colorante, el buttermilk y la vainilla. Aparte mezclamos el vinagre con el bicarbonato y lo agregamos. Batimos bien. En otro bol tamizamos la harina con la sal, el polvo para hornear y el cacao y agregamos de a poco a la preparación anterior. Batimos hasta integrar todo y colocamos en los recipientes para cupcakes o magdalenas. Horneamos unos 16 min. 

 Y el resultado son éstos rojos cupcakes con una textura (tal cual su nombre lo indica) de terciopelo y un sabor exquisito!! 
  Nota: me hubieran gustado más rojos, creo que el fallo es que le agregué demasiado rojo, la próxima pruebo con 1 cucharada solamente, o quizás también debo cambiar la marca del colorante. Por ser los primeros igual me enamoraron...

Claro que yo no pude resistirme a sus encantos y (antes de que desaparecieran todos, pues en casa fueron un éxito rotundo) me guardé algunos para decorar. 

  

  Las bases son de fondant, que teñí de rojo en algunos casos. Los detalles están hechos con glasa y los corazones son de pasta de goma.

  En éste utilicé un marcador de corazones pequeñito para hacer los bordes.

Y a éste otro lo pinté con un poco de colorante en polvo plateado... para darle un toque más sugerente... (en la foto no se aprecia mucho, pero bue... la fotógrafa es así!)

  Y por último les dejo al "patito feo" del conjunto... porque no tiene corazones y porque como verán, toqué la glasa roja y quedó una mancha en el borde (pero igual lo pongo porque una es humana y se equivoca). Además me gustó porque al fondant le pasé un rodillo texturado (es de ositos y hojas, por si no se ve) que quería probar, y la mariposa en pasta de goma (la hice con un molde de glicerina, que también quería probar).

 Son perfectos para regalar en un aniversario, para unos novios, para una boda y para alguna amiga o amigo, pues siempre es un buen momento para decir TE QUIERO!! A mi me gustan todos. Ustedes con cuál se quedan? 

  Mucho cariño para tod@s y miles de besos.