Tarta fondant de Comunión

   

   Me encargaron una tarta de comunión para una niña. La querían sencilla, con una muñeca y  flores; lo demás lo dejaron a mi libre imaginación.

   Era para una celebración familiar íntima, así que la tarta tenía que ser pequeña.

   Y allí me puse yo: a crear primero en mi mente y luego a plasmar eso en la tarta. A veces parece sencillo, pero plasmar lo que los demás quieren en una tarta es una tarea al menos arriesgada! jajaja...

  Hice con antelación la muñeca que iba a ser el centro de la tarta. Primero hice la base con pasta de modelar y luego forré la parte de abajo con la falda en pasta de goma. Para la cara utilicé un molde de silicona y la hice con pasta para modelar, teñida de marfil. El cabello lo hice con glasa teñida de marrón y un toque de amarillo. 

 La falda del vestido la marqué con un cortador de flor, muy pequeñito.

El bizcocho lo hice de chocolate, y lo rellené con una ganache de chocolate blanco  y de crema de avellanas. Humedecida con almíbar y forrada con fondant de nubes. Las flores las realicé (el día anterior) con de pasta de goma y el centro es de glasa amarilla. La cinta de terminación con el moño, y el camino, son también de fondant.

 

   La diadema está hecha con una cinta de pasta de goma y una flor de la misma pasta.

   Pegué las flores del camino con glasa y las letras las hice con colorante amarillo dorado (de Wilton).

    El costado de la tarta también lo marqué con el mismo cortador de flores de la falda (no se si se aprecia bien en las fotos). Luego le di un toque de purpurina comestible dorada al camino de flores, para que la tarta quedara más delicada.

Y aquí tienen el resultado final. Tengo que decir que les gustó mucho (por fuera y por dentro!). Gracias!!